Hace poco estuve en un curso muy especial: defensa personal. Lo convocaba mi sindicato (sí , soy de un sindicato, qué pasa, los pilotos y controladores aéreos también lo tienen, aunque lo aprovechan mejor que los médicos) . Vicente Cañaveras Ballesteros, gran maestro , y David, maestro de Kung Fu, transmitieron su saber durante dos días (bueno, también Miguel Angel fue mi maestro ). Aprendimos llaves y recursos para la defensa ante ataques que pueden ocurrir cualquier día en nuestras consultas.
Sí, porque se dice que cada vez son más los médicos y personal de enfermería agredidos, especialmente en atención primaria y servicios de urgencias (que levante la mano quien no haya tenido alguna experiencia personal o como testigo).
Yo tuve un pequeño incidente. Una paciente intentó pegarme con la muleta que portaba, además de insultarme y ponerme verde delante de los pacientes que aguardaban en la sala de espera. En mi defensa , diré que tenía trastornos psiquiátricos (ella, yo no).
La experiencia fue algo penosa. Porque, aunque lo cuente ahora más relajado, viví – al modo “light”-las consecuencias psicológicas que refieren los manuales sobre el maltrato: confusión, culpabilidad, tristeza.
No lo denuncié . Comuniqué el hecho a mi Gerencia. Recibí una amable carta aludiendo a un “protocolo”. Todo consistió en cambiar de turno a mi paciente –es lo que ella quería-.Bueno, pensé, espero no encontrármela ningún día con un cuchillo en el párking de mi centro. Lo que pasó fue más jocoso.
Un día escuché gritos desde mi consulta. Era mi paciente, que había llegado una hora tarde a hacerse una analítica. Sus gritos ya no iban dirigidos a mi humilde persona. Ahora eran extensibles a tooodo el personal de mi centro . La armó . Y consiguió lo que quería: se hizo el análisis. El protoculo había funcionado.
No pasaa nada .. para eso estamos, politica y electoralmente , en "udssdm" uno de los mejores sistemas sanitarios del mundo.
ResponderEliminarLos medicos debiendo aprender karate para poder trabajar y como guinda atender a pacientes a la velocidad de las cajeras de los super
En serio: la realidad siempre supera a la ficcion
Tienes razón. Lo voy a proponer como una competencia esencial más para Medicina de Familia: "Defensa personal".
ResponderEliminarSe podría incluir en el módulo: "La comunicación asistencial. La entrevista clínica. La relación médico-paciente... Defensa personal del médico".Quedaría al mismo nivel que "Razonamiento clínico", "Gestión de la atención" y "Bioética".
Sería bonito ver tutores "cinturón negro", como una cualificación añadida para avanzar en la carrera profesional.
Un abrazo.
Eduardo.
Me recuerda a una película japonesa, me imagino que de Kurosawa, en la que el protagonista era un médico y cada vez que alguién pretendía atacarle les advertía que él era médico y que por eso deberían tener cuidado ;-)
ResponderEliminarMuchas gracias, Juan Manuel. He buscado en Google qué película podría ser y creo que ya la tengo:
ResponderEliminarVer un sabroso comentario en:
http://anfibiamente.blogspot.com/2010/01/akahige-akira-kurosawa.html
Tengo ganas de encontrarla y verla ya.Promete.
Respecto a lo que dices, los médicos somos hábiles en el arte de hablar y no provocar (tenemos muchas tragaderas, que diría otro). Aunque de vez en cuando salga algún Dr House.
Un abrazo.
Eduardo.
Hola estoy buscando al gran maestro Vicente Cañaveras Ballesteros, sabe donde podría encontrarlo?
ResponderEliminar